1/16-1/22

Otra semana ha pasado y sé que estoy más acostumbrada a la manera de vida aquí que estaba las semanas pasadas. No me preocupa tanto ni el tráfico, ni la incapacidad de seguir un plan, ni la desorganización de la ciudad. También he creado mi propia rutina para ir a clase, trabajar en las aldeas, cenar, hacer tarea, y dormirme. Me siento como tengo un poco más de control en mi vida que había tenido antes. También , me ayuda a tener otro juego de llaves. Antes, solamente tuvimos un jugo para tres personas y no pude salir sola sin preocupándome con las llaves o cuando tenía que volver para revolver las llaves a mis compañeras de cuarto.
Esa semana no hubo mucho tiempo para explorar debido a la montón de tarea nos asignaron. Aun así, en lugar de tener clase en la universidad el jueves, subimos el Cerro Ancón para ver la ciudad y apreciar la historia de panamá. La vista era bonita pero cuando tuvimos que recitar el poema de Amelia Denis de Icaza, se sentía como estábamos iniciado en un culto. Sé que supuso sentir profundo pero en realidad, era extraño.
Durante el fin de semana, fui independiente a Casco Viejo. Casco Viejo es el parte antiguo de la ciudad y está llena de turistas y artesanos. Los bocinazos constantes de los coches resonan en las calles estrechas enmarcadas por edificios antiguos. Caminando por la costa, podía ver la ciudad de panamá en la distancia. Esta yuxtaposición entre el nuevo y el antiguo crea una atmósfera interesante y me hacía sentir como estaba en un mundo diferente. Cómo la ciudad y el ruido y el estrés de escuela no existían. En un sección de Casco Viejo, a lo largo de la costa, hay una calle peatonal donde encontré muchos artesanos quien estaban vendiendo molas (una forma de arte tradicional en panamá), collares, pulseras, y otras cosas turísticas. Eran turísticas porque muchas de las cosas tuvieron “Panamá” escrito en ellos y sola turistas van a comprarlos. También, hay artistas y pintores quien venden sus obras en la calle. Encontré un hombre quien hizo arte en camisas usando una pluma de lejía. Nunca lo he visto antes y si tuviera más dinero en efectivo, habría comprado una de las camisas pero solo tuve $20 y costaron $25. Ese mercado me recordé de un mercado en Santiago de Chile donde visitaba mucho el año pasado. La única diferencia era que el en Santiago estaba dentro de un edificio y el aquí en Panamá está en el aire libre. Casi todo el resto es la misma en general. Me encantó mi día en Casco Viejo porque era generalmente tranquilo porque pude caminar despacio y hablar con la gente. También, me encantó porque era mi primer y probablamente mi último día sola. Soy un poco introvertida y por eso, días cuando no tengo que estar con las mismas personas me hacen sentir muy contenta y tranquila. Con dos compañeras de cuarto, es muy difícil encontrar tiempo para ser sola y ese día en Casco Viejo era la oportunidad perfecta para disfrutar un día independiente.
Mi madre anfitriona, llamada Lucy Singh, es una mujer extraordinaria. Tuve la oportunidad de aprender sobre su vida y pedirle consejos. Primeramente, tiene más de 80 años pero se parece como tiene 70 años. También, era una enfermera empezando en los 1950s cuando tenía 20 años y trabajó como enfermera por décadas. No me dijo cuando retiró. Se casó con su esposo en 1957 (ese año es su quincuagésimo aniversario de boda) y tenía su primera hija el próximo año. Tiene tres hijas. Una vive en casa con ella, otra está casada y vive en el centro do la cuidad, y la tercera está casada y vive en Florida en los Estados Unidos. Mientras criaba sus hijas, Lucy todavía trabajó y también tomó clases por la noche. Lucy dijo que era un tiempo muy difícil y tuvo problemas con su esposo a lo caso del estrés. También me aconsejó que no grite a una persona importante en mi vida cuando estoy enojada. Lo dijo porque cuando una person empieza a gritar, deja a tener sentido o credibilidad. Aparecí el consejo porque aveces tengo dificultades manteniendo la ira especialmente cuando tengo un desacuerdo con mi hermano mayor porque nunca quiere confesar cuando no sabe algo o dice algo incorrecto y por eso, no estamos de acuerdo en general. También, Lucy me aconsejó que durante tiempos difíciles tengas que trabajar duro porque al final valdrá la pena y a abandonar el reto va a dejarte con remordimientos. Cómo una estudiante en la universidad, es fácil a olvidar el razón para estudiar y tomar clases difíciles y fue agradable a recordar el valor de trabajo duro. Finalmente, Lucy no piensa que va a ser una abuela en su vida porque ninguna de sus hijas van a tener o quieren hijos. Por esa razón ella empezó a tener hijas anfitrionas. Ella está haciendo lo mejor de la situación.
En las aldeas esa semana quiero apoyar los niños más jóvenes a hacer cosas nuevas. Algunos de ellos son nerviosos a probar cosas nuevas especialmente cuando no nos conocen. También, uno de mis objetivos es oír uno de los niños pequeños hablan. Pienso que es raro que los niños pequeños no hablan con nadie. No sé si ellos todavía tienen miedo de nosotros o si no quieren hablar pero es mi objetivo a tener una conversación básica con uno de ellos.
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