Tercera Semana

Acabo de terminar la última semana en las aldeas. Para mí, fue una experiencia inolvidable. Aunque los niños han sufrido diferentes traumas, todos son resistentes y me inspiran mucho. En el último día allí, les regalemos muchas cosas para la casa y escuela. Le preguntemos a la tía de nuestra casa si hay una necesidad más caro que podíamos comprar para ayudarles financieramente. Ella dijo que uno de los chicos tiene problemas de los riñones y por eso, usa pañales. Compremos como 6 cajas de Pampers. Estoy agradecida por esa experiencia con los niños y me parece que fue buena para mi carrera futura con el desarrollo comunitario con un enfoque en los jóvenes y niños.

Durante la semana, fuimos en una gira de las esclusas de Miraflores. Tuvimos buena suerte porque cuando lleguemos, un crucero grande paso por las esclusas. Fue interesante a ver cómo funcionan las esclusas. La semana pasada, fui en una lancha por la misma esclusa, entonces me gusto tener otro mirador del canal. Como soy una nerd, la película y la exhibición de la historia del canal fue tan genial. En una exhibición había un cartel que habla sobre los gringos que vinieron a trabajar y vivir en panamá durante la construcción del canal. Yo había observada mucha influencia norteamericana aquí en panamá como los nombres de barrios como Clayton, Albrook, y Causeway. También hay mucha influencia en la política. Mi amigo panameño mi dijo que, aunque la cultura panameña es distinta, los norteamericanos han dejado mucho en panamá y por eso hay sentimientos contra los norteamericanos y la presencia que todavía existe en el país. Asimismo, él me ha dicho que los panameños tienen una memoria corta en respeto a la invasión norteamericana.

En el último fin de semana, fui a Bocas del Toro. Estoy feliz que tuve la oportunidad de viajar a ese lugar porque en realidad es un paraíso. El agua allí es cristalina y podía ver el suelo, aunque el agua es honda. La mejor excursión que hice allí fue cuando anduve en velero a unas islas. Vi un delfín y muchas estrellas del mar. El capitán del velero fue un chico que nació en la zona del canal durante la invasión norteamericano. Me di cuenta que el tenia mucho privilegio por crecer en esta zona. Su nivel de ingles fue alto, ha viajado mucho, y tiene mucho dinero. Estoy seguro que todo eso tiene que ver con su estatus de ser de la zona del canal.  Para un amante del mar, me enamore de las islas. También, la gente en la isla son buena onda. A mí me gusta mucho la gente hippy o sea bohemia, entonces conocí a mucha gente en Bocas que me caen muy bien. A pesar de que me quemé bastante, este viaje fue increíble.

reflexión 2

Hace 3 semanas en panamá y todavía estoy fascinada con el ritmo de vida aquí.  Aunque es una ciudad grande, no se siente así porque la gente anda muy tranquila y sin prisa. Mi mama de aquí me dijo que su única queja de este país es que la gente siempre esta tarde, o sea, ellos no son puntuales. En mi ciudad, el ritmo de vida es caótico por los horarios de la gente y como resultado no tenemos tiempo para disfrutar la vida porque siempre estamos de prisa. Por eso, me encanta la manera de vivir aquí en Panamá.

En las dos semanas pasadas, he hecho muchas cosas divertidas. Fui a 3 partidos de fútbol, subí en el cerro ancón, viaje en lancha por el canal, y visité una reserva de monos en Gamboa. Para mí, la excursión por el canal fue el momento más exitoso de todo el viaje. El tour empezó en la bahía, y pasemos por dos esclusas. El capitán me invito a subir arriba de la lancha y tenía la oportunidad de manejar la lancha por un momento. Fue una experiencia inolvidable. El capitán fue una persona muy interesante. Aunque el capitán solo quería hablar en ingles conmigo, me gusto mucho nuestra conversación. El me explico sobre la importancia del canal para los panameños y sobre la cultura alrededor del canal. Me dijo que la mayoría de la gente que viven en la zona del canal tiene mucho poder económico y influencia política por el dinero que tienen. También, me dijo que los mejores trabajos en panamá están ubicados en esta zona. La cultura allí todavía es parecida a la cultura estadounidense, y asimismo, mucha gente en la zona habla ingles con fluidez. Estoy feliz que tuve la oportunidad a conocer el capitán y aprender mas sobre el canal.

Como soy estudiando economía y relaciones internacionales toda la política del canal me da mucho interés. Yo aprendí que el canal de Panamá es el único lugar en todo el mundo donde un capitán le entrega su poder a otro capitán (porque solo un capitán panameño puede pilotar una lancha por el canal).  Asimismo, el tema de los costos para entrar en el canal fue un punto de interés para mí. El guía dijo que en general, les cobran $135,000 para la entrada. Los ingresos del canal son divido 50% entre la agencia del canal y el gobierno. El año pasado, ellos ganaron más que $3.6 billones en esta manera.

El trabajo social con los niños en las aldeas sigue siendo la mejor parte del viaje. En esta semana, yo tenia mucho estrés por las quejas de unos estudiantes de nuestro grupo quejan sobre los niños agresivos en las aldeas. Para mí, los niños son incomprendidos y en realidad son divinos, pero por el estrés y trauma que tienen, a veces actúan así para llamar la atención. En los días que quedan, me gustaría ensenar los otros estudiantes que hay otra manera para reaccionar a estas situaciones con los niños.

La primera semana en Panamá

Cuando yo tenía 14 años, viví en panamá por 2 meses. Antes de viajar esta vez, no sabía si todo sería lo mismo y diferente. Tenía unas expectativas sobre la ciudad y mi familia de aquí. Hace una semana que lleguemos en Panamá y ya encontré muchas diferencias entre Panamá y los Estados Unidos. Las diferencias que me llaman la atención son la comida, las costumbres de la gente, y la belleza del país.

En el primer fin de semana, fuimos a la isla Taboga para disfrutar un día de sol. Allí conocimos el Tío Kikito de Alex. Él les enseno como cocinar comida típica de Panamá. Le preguntamos mucho sobre la comida panameña y las formas de cocinar aquí, que son diferentes las de EEUU. El grupo ayudo en la preparación de los patacones. Patacones son una comida a base de trozos aplanados fritos de plátano verde. ¡Que ricos son los patacones! Me encanto esta experiencia para aprender no solo como cocinar, pero también costumbres panameñas. Tío Kikito me dijo que los patacones son un bocado tradicional que todos los panameños pueden disfrutar porque los ingredientes son baratos y es fácil para cocinar. Me da interés que hay una comida que puede encontrar en cualquiera parte de Panamá porque en estados unidos no hay una comida típica así que pertenece por todo el país.

Unas diferencias culturales que me enfrente aquí son los piropos callejeros y los saludos. En Estados Unidos, hay hombres que hacen piropos en las calles, pero no son tan atrevidos como los de panamá. Siempre cuando estoy caminado, los coches están pitando y gritando cosas ascosas. Para mí, es una falta de respeto para las mujeres y no me gusta para nada. Al contrario de eso, me gusta mucho la manera de saludar otras personas aquí. La gente da besos en las mejillas y dice “buenos días” cuando me pasa. En estados unidos, la gente es muy fría y nunca toca los desconocidos ni les habla.

  El siguiente día, casi todo el grupo viajo a Valle de Antón. En este lugar, subimos en la montaña, la India dormida. El esfuerzo para subir vale la pena porque en la cima de la montaña puede ver millas y millas. Nuestro guía, Miguel, me dijo que hay una leyenda sobre el origen del nombre de la montaña que tiene que ver con la historia de panamá y los conquistadores. Miguel me ensenó que cuando estas en el base de la montaña, la cima parece como una mujer durmiendo. Cuente la leyenda que la hija del cacique Urraca, el jefe de una tribu de Guaimíes, quería casarse con un conquistador que sometía a su pueblo, pero no quería traicionar la tribu. Entonces ella renuncio su amor por el español y se fue llorando para las montañas. Ella falleció allí entonces la montaña decidió a tomar la figura de ella. Para mí, la leyenda es un mito muy interesante y tiene que ver con la tristeza a causa de la conquista.

Durante la semana, fuimos 3 veces a Las Aldeas Infantiles para jugar con los niños. Como soy una persona que le encanta jugar con niños, estaba tan emocionada para esta actividad. En EEUU, trabajo como una maestra de natación de niños, entonces el primer día en las aldeas, yo nade con los niños. Compre una pelota de la piscina y dos flotadores. Los chicos son tan amables y juguetones. Cuando estábamos saliendo en el primer día, 5 chicos me abrazaron y uno me dijo – ahora soy tu novio – no podía dejar de reír.

 

La primera semana en Panamá

 

Cuando yo tenía 14 años, viví en panamá por 2 meses. Antes de viajar esta vez, no sabía si todo sería lo mismo y diferente. Tenía unas expectativas sobre la ciudad y mi familia de aquí. Hace una semana que lleguemos en Panamá y ya encontré muchas diferencias entre Panamá y los Estados Unidos. Las diferencias que me llaman la atención son la comida, las costumbres de la gente, y la belleza del país.

 

En el primer fin de semana, fuimos a la isla Taboga para disfrutar un día de sol. Allí conocimos el Tío Kikito de Alex. Él les enseno como cocinar comida típica de Panamá. Le preguntamos mucho sobre la comida panameña y las formas de cocinar aquí, que son diferentes las de EEUU. El grupo ayudo en la preparación de los patacones. ¡Que ricos son los patacones! Me encanto esta experiencia para aprender no solo como cocinar, pero también costumbres panameñas.

El siguiente día, casi todo el grupo viajo a Valle de Antón. En este lugar, subimos en la montaña, la India dormida. El esfuerzo para subir vale la pena porque en la cima de la montaña puede ver millas y millas. Nuestro guía, Miguel, me dijo que hay una leyenda sobre el origen del nombre de la montaña que tiene que ver con la historia de panamá y los conquistadores. Miguel me enseno que cuando estas en el base de la montaña, la cima parece como una mujer durmiendo.

En el feriado, pasemos el día explorando Casco Viejo. Me gusto mucho ver toda la arquitectura antigua en esta zona. Conocimos el mercado artesiana donde hay muchas cosas hecho a mano de el tribu Kuna.

Durante la semana, fuimos 3 veces a Las Aldeas Infantiles para jugar con los niños. Como soy una persona que le encanta jugar con niños, estaba tan emocionada para esta actividad. En EEUU, trabajo como una maestra de natación de niños, entonces el primer día en las aldeas, yo nade con los niños. Compre una pelota de la piscina y dos flotadores. Los chicos son tan amables y juguetones. Cuando estábamos saliendo en el primer día, 5 chicos me abrazaron y uno me dijo – ahora soy tu novio – no podía dejar de reír.

Hola!

Yo

¡Hola! Me llamo Cristiana Little, tengo 21 años y estoy en mi último año de la Universidad. Tengo dos carreras: relaciones internacionales con un enfoque en desarrollo y América Latina y economía. Tengo muchas ganas de trabajar en un país hispanohablante después de graduarme, pero todavía no sé dónde.

 

mi novio

 

Cuando no estoy en clases, paso mucho tiempo trabajando. Soy una maestra de natación para niños de 14 meses hasta 12 años. Después de trabajo, juego futbol en un equipo con mi novio y su familia. Casi todos los findes, tenemos un partido o torneo.

 

 

Mi familia

A mi familia le gusta mucho compartir nuestra casa con estudiantes de todo el mundo y conocer nuevas culturas. 25 estudiantes de intercambio han vivido en mis casa. Todos los estudiantes que vivian con nosotros son como familia. Esta foto de mi familia es con mi “hermana” costariccense.

Desde mi niñez, tenía una pasión para viajar. Cuando yo tenía 14 año, viví en Panamá por 3 meses. Estaba trabajando como voluntaria con niños en una escuela primeria. Me encantaron la gente y cultura panameña (y la comida) y por eso quería volver. Mi viaje más reciente duró un año trabajando como un pasante en Argentina. Trabajé con un ONG luchando contra la trata de personas

Panama 2010

Apoyando la seleccion Argentina!!!!!  

¡Estoy ansiosa por este paseo en Panamá!